JUEVES 11
Continuamos con este nuevo planteamiento del cubismo analítico. De nuevo representamos a nuestros compañeros.
Es importante simplificar la imagen en una geometría bastante sencilla. En este caso vemos una serie de líneas que conectan las principales partes del cuerpo (frente, oreja y mentón; deja, ojo, nariz y hombro; y así sucesivamente). Para ello, he hecho una serie de aproximaciones con distinto color, para así encontrar la mejor solución.
Una vez geometrizado, es el momento de la "deformación", por llamarlo de algún modo. Esas piezas que componen la figura se van desplazando, y van introduciendo la tensión propia de este cubismo analítico al retrato. Sinceramente, este ejercicio me ha resultado más complicado de lo que esperaba. El hecho de tener que mantener en todo momento el nivel justo de tensión es difícil.
Es importante que probemos distintas opciones. Para ello dos herramientas muy utiles son el papel de croquis y el photoshop. En este caso, yo he optado por la segunda opción. De nuevo con esta geometría desplazada comenzamos a delimitar las superficies más relevantes.
Hoy finalizaremos el trabajo que empezamos ayer. Consiste en traducir todo el proceso de geometrización, y llegar a la imagen final. Para ello usamos acrílicos, y empezamos a marcar un fondo, una matriz de la que irán surgiendo las formas.
El trabajo de hoy ha sido bastante gratificante, y he disfrutado mucho con él, a pesar de que el acrílico no se me de del todo bien. Lo que más me gusta de la imagen es el hecho de que la cara sea lo más definido ( en ella se puede distinguir ojo, nariz y boca) y que la forma del resto del cuerpo se vaya fundiendo con el fondo.
